Todo el apoyo para Guerrero, ¿Y los Choyeros que?
Artículo de Opinión
El Gobierno del Estado de Baja California Sur enfrenta duras críticas debido a la apertura de centros de acopio para los damnificados del Huracán OTIS en Guerrero.
Esta medida ha sido considerada incongruente, ya que aún no se han atendido completamente las necesidades de los damnificados del Huracán Hilary. Así es, aquel Huracán que Golpeó a Mulegé a finales del mes de agosto. Muchos residentes de Mulegé continúan viviendo en condiciones precarias, habiendo perdido gran parte de su patrimonio, incluyendo sus hogares, vehículos, electrodomésticos, camas y colchones. La falta de apoyo y la demora en la llegada de ayuda ha generado cuestionamientos por parte de la población. A pesar de haber transcurrido 50 días desde el paso del huracán Hilary, los afectados aún se encuentran en lista de espera sin recibir los recursos necesarios. Aquellos que se quejan o expresan su inconformidad son sujetos a investigaciones, generando un clima de descontento y censura.
Sin embargo, el Gobierno y sus seguidores argumentan que estos problemas pertenecen al pasado y que ya han sido superados. Según Don Víctor Castro Cosío, han pasado siete días desde el paso del Huracán Norma, que azotó a La Paz y Los Cabos. A pesar de esto, la situación de la ciudadanía sigue siendo incierta, pues aún no se ha recibido ningún apoyo del Gobierno Federal. Mientras el Gobierno muestra entusiasmo en asistir a eventos políticos y discursos de la llamada «cuarta transformación», la población demanda con urgencia el regreso de los recursos del FONDEN y refuerzos en la Comisión Federal de Electricidad (CFE). El Gobernador ha sido duramente criticado por su falta de respuesta ante la contingencia provocada por el huracán Norma y por no haber restablecido completamente los servicios en las colonias afectadas. En lugar de priorizar estas necesidades urgentes, Don Víctor ha promovido una campaña para enviar apoyos a Guerrero, para subirse «al tren del mame» lo cual ha generado aún más inconformidad entre los ciudadanos.
La ciudadanía exige coherencia y congruencia por parte del Gobierno, considerando que no es justo que se intente quitar lo poco que tienen los sudcalifornianos, quienes apenas logran sobrevivir. Parece que el Gobernador busca ganarse el favor del Presidente de la República, a pesar de que su imagen no se encuentra bien posicionada en la región, debido a su apoyo público a Adán Agusto López. La población comienza a dudar de la determinación del Gobernador Víctor Castro al solicitar ayuda y apoyo de la federación, especialmente cuando se trata de los sudcalifornianos. Un ejemplo claro de esta falta de apoyo es que Baja California Sur no ha sido considerada para recibir descuentos en los servicios de la CFE, sin una razón aparente. Según informes, el Gobernador ha mostrado una actitud sumisa y complaciente, dando prioridad a los intereses del Presidente sin considerar las necesidades de los sudcalifornianos. Como resultado, los afectados en Baja California Sur se encuentran sin apoyos, mientras que los recursos se destinan a Guerrero, dejando al estado devastado por el paso del huracán OTIS en una situación de abandono económico.