ARTICULO DE OPINIÓN
COLUMNA POLÍTICA
ERICK LEÓN
REGIDOR CON SEÑALAMIENTO DE DESESTABILIZADOR, COACCIÓN Y CORTES DE AGUA POTABLE EN LAS COLONIAS DE LOS CABOS, JUNTO CON SU PERSONAL EN NOMINA, POR AMBICIONES PERSONALES Y POLÍTICA, DEJAN SIN AGUA ALGUNAS COLONIAS DE LOS CABOS PARA ALEBRESTAR A LA GENTE.
En Los Cabos, la crisis del agua potable ha sido una preocupación constante durante décadas. A pesar de los esfuerzos para abordar esta problemática, el suministro de agua sigue siendo insuficiente para satisfacer las necesidades de la población. En este contexto, es importante examinar el papel de ciertos actores políticos que, aunque no son originarios de Baja California Sur, desempeñan un papel destacado en la política local.
Uno de estos personajes es José Catarino Flores Castro, conocido públicamente como «Catarino Flores» o «El Catarino». Originario del estado de Sinaloa, ha estado involucrado en diversas actividades y ha sido objeto de controversia en la política sudcaliforniana. Entre sus antecedentes se encuentra su participación en invasiones de terrenos y su papel como agitador en las colonias más marginadas del Municipio de Los Cabos.
«Catarino Flores» se convirtió en el Séptimo Regidor del Ayuntamiento de Los Cabos como parte de la administración actual encabezada por el alcalde Oscar Leggs Castro. Su inclusión en el equipo de gobierno se dio como parte de las negociaciones para consolidar la alianza con el Partido del Trabajo y formar la coalición «Juntos Haremos Historia». Es importante señalar que, a pesar de no ser miembro del Movimiento de Regeneración Nacional (MORENA), se le ha brindado respaldo por parte de Víctor Castro Cosío, gobernador de Baja California Sur.
El historial político de «El Catarino» está marcado por diversas sombras. Además de no ser originario de la región, ha sido beneficiado con un sueldo elevado gracias a sus influencias políticas y padrinos, como el gobernador Víctor Castro. En consecuencia, su grupo de colaboradores y asistentes ha generado desestabilización en la región, realizando acciones perjudiciales como dañar infraestructuras de agua potable, obstruir sistemas de drenaje e incluso interrumpir el suministro eléctrico en algunos pozos de las colonias más necesitadas de Los Cabos. Lamentablemente, los más afectados por estas acciones son los habitantes de dichas colonias.
Es importante destacar algunos de los privilegios que «Catarino Flores» disfruta en su cargo como Regidor. En primer lugar, es evidente su práctica de nepotismo, contrató a varios miembros de su propia familia en la nómina del Ayuntamiento de Los Cabos. Su esposa, Natividad Benítez Torres, fue contratada el 1 de noviembre de 2021 y recibe un sueldo de $16,928.58 pesos. Además, sus familiares María Isabel Flores Castro, Martha Genoveva Flores Castro y Santos Jesús Flores Castro también forman parte de la nómina, con salarios de $16,928.58 y $13,497.20 pesos, respectivamente.
Además de su familia, «El Catarino» ha incluido a otras personas en su abultada nómina. Entre ellos se encuentran Norma Asucena Bernal Medina, Adelaida Cruz Soriano, Jorge Luis Fausto Flores, Aidee Hernández Jaime, Ana María Jiménez Pérez, Gladys Jiménez Pérez, Víctor Marín Lozano, Víctor Manuel Montaño Gaytán, Ma. Martha Morán Bibiano, Rafael Alfredo Rivera Ramos y Ana Karen Araujo Duarte, quienes reciben salarios de hasta $17,000 pesos mensuales, todos ellos dependientes de la nómina del Ayuntamiento de Los Cabos bajo la responsabilidad del Regidor Catarino Flores.
Estos privilegios y prácticas nepotistas van en contra de los principios básicos de MORENA, que aboga por la honestidad, la transparencia y la rendición de cuentas. La contratación de familiares y el inflado de la nómina son acciones que contradicen los ideales de este partido político y generan descontento entre la población.
Es necesario realizar una reflexión profunda sobre el papel de «Catarino Flores» en la política local y las consecuencias de sus acciones. La crisis del agua potable en Los Cabos requiere de líderes comprometidos y honestos que trabajen en beneficio de la comunidad, dejando de lado intereses personales y prácticas cuestionables.